La bahía de Palma

Palma es una ciudad mediterránea, construida en el corazón de la Bahía a la que da nombre, un litoral de 260 km que abarca además parte de los municipios de Calviá y Llucmajor, un paisaje en el que no faltan faros, calas y playas de aguas cristalinas, palacios, castillos y fortalezas, puertos y clubs náuticos, las embarcaciones más lujosas del mundo se mezclan con las embarcaciones tradicionales de la isla, etc. Desde el mar de la Bahía, encontramos una de las vistas más espectaculares de la ciudad, destacando la Catedral y en el horizonte la Serra de Tramuntana, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Acompañamos hoy en un recorrido por la Bahía de Palma, ¡Bon vent i bona proa!

UN PASEO POR LA BAHÍA

Comenzamos nuestro recorrido por el Oeste de la Bahía, en el municipio de Calviá, desde el Faro de Cala Figuera, nos encontramos con calas protegidas por pinares, las más conocidas en Portals Vells, con un pequeño puerto, cuevas, antiguas canteras de marés (piedra arenisca autóctona con la que se construye la Catedral) y su famosa Cala del Mago que lleva este nombre por el rodaje de la película homónima de Guy Green en 1968. Luego comienza la zona más urbanizada del municipio, las Playas de Magaluf y Palmanova hasta llegar a Portals Nous, uno de los puertos más prestigiosos de la isla.

A continuación, comienza el municipio de Palma y antes de llegar a la ciudad, destacan las Playas de Illetas donde encontramos varios islotes y Cala Major, con vistas al Palau de Marivent, residencia de los reyes de España en la isla que se encuentra junto a una zona militar y una fortaleza renacentista, El Castillo de San Carlos (museo militar), seguido llegamos a Porto Pi, puerto natural de Palma desde tiempos romanos, su faro es el tercero más antiguo en uso del mundo, después de la Linterna de Génova en Italia y la Torre de Hércules en Galicia.

Continuamos con el Paseo Marítimo y Club Náutico de Palma, veremos lujosos yates de todo el mundo, la industria náutica y de reparación de barcos es un sector importante de la economía en la isla. Esta parte de la bahía está vigilada por el Castillo de Bellver (museo de la ciudad), un palacio-fortaleza del siglo XIV de estilo gótico y planta circular, único en España de estas características.

En el Club Náutico de Palma se celebra cada año la Copa del Rey, una de las regatas más importantes del mediterraneo entre otras. Detrás de estas competiciones, se encuentra un viento térmico que conocemos como S’embat, propio de las bahías de mallorca (también ocurre en la Bahía de Alcudia y Pollença), una brisa marina que nos acaricia la piel en los meses más calurosos del año.

Después del Paseo Marítimo nos encontramos los antiguos molinos harineros del siglo XIV y por fin llegamos a la Ciudad Antigua, aún conservamos en el frente marítimo parte de las murallas renacentistas, ofreciendo una vista similar a las descripciones que los Archiduques de la casa de Austria nos han dejado de su llegada a Palma en el siglo XIX: Las visitas a la capital de la isla destacan por su catedral gótica, protegida por hermosas murallas doradas bañadas por un azul ultramarino, rodeadas de una cadena montañosa, pintoresca y rocosa, un juego de formas y colores que ofrecen un efecto armonioso…

Dejando atrás la Ciudad Antigua, dirección al este, comenzamos a encontrarnos los barrios de Es Portixol, Es Molinar, Ciudad Jardín,… con pequeños puertos de embarcaciones tradicionales de las islas, los Llauts. Luego Es Carnatge, zona natural protegida, con antiguas canteras de marés, desde aquí se aprecian los mejores despegues y aterrizajes de los cientos de aviones que llegan al aeropuerto de Palma cada día y llegamos a Can Pastilla, donde encontraremos el islote de Na Galera con un yacimiento arqueológico de época fenicia (siglo IV y II A.C) y el Club náutico de Can Pastilla, desde donde comienza la Playa de Palma, un extenso arenal de 4,6 km que atrae millones de turistas cada año.

Al final de esta playa, nos encontramos con el Club Náutico del Arenal que pertenece ya al municipio de de Llucmajor, a partir de aquí la imagen urbanística disminuye a favor de de la naturaleza, si bien aún encontramos algunas zonas residenciales, poco a poco nos sumergimos en la Reserva Marina de la Bahía de Palma, donde encontramos una antigua fortaleza del siglo XIX restaurada y convertida en el hotel más exclusivo de Mallorca que se funde con el paisaje. Seguiremos pasando por antiguas canteras de marés, acantilados, cuevas y zonas verdes hasta llegar a Cap Blanc, el final de nuestro recorrido por la Bahía.

LA POSIDONIA

En el fondo marino de las Baleares, también de la Bahía de Palma, se encuentran extensas praderas de Posidonia Oceánica, una planta acuática endémica de las islas, uno de los seres vivos más longevos del planeta, con más de 100.000 años. En este bosque submarino conviven más de 1.500 especies entre fauna y flora, aportan estabilidad a nuestras costas y son la razón de la gran calidad que tienen nuestras aguas cristalinas. Si vienes a Mallorca a navegar, recuerda que estas praderas están protegidas y no se puede anclar en ellas ¡Ayúdanos a proteger este gran tesoro!

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